DRUZOS/DRUSOS.
ORIGEN DE LA DOCTRINA ESPIRITUAL UNITARIA DRUZA.

   Los drusos o drusos se llaman a sí mismos Ahl al-Tawhīd «gentes de un solo Dios» (monoteístas), también llamados Unitarios o Muwajeddin o la Fe del Tawhid. Se discute cual es el origen del nombre de «druso», que se suele atribuirse a Nashtaquin Ad Darazi, uno de los primeros misioneros de la secta, quien predicó la Doctrina en tiempos del Califa Al-Hakim Bi-Amrillah en sus etapa iniciales, considerado posteriormente un hereje por los drusos tras tergiversar la doctrina unitaria a su beneficio.

   Los drusos creen en la unidad de Dios, y la unión del ser humano con Dios a través de la Mente Universal o Al-Aql, por lo tanto, son netamente monoteístas, de allí la palabra Tawhid o Unitario, cuya doctrina y credo se originó en la antigüedad, desde que el hombre camina sobre la faz de la tierra, y ha venido evolucionando en las distintas eras y ciclos de la historia cronológica de la humanidad, hasta que se hizo un nuevo ciclo o Llamado Divino que se desarrolló en el siglo XI en tiempos del Califa Fatimita, el Imam y Maestro Al Hakim Bi Amrillah.

 

   Como Doctrina religiosa acepta la legitimidad de los profetas unitarios de otras épocas anteriores, tales como los de las tradiciones griega, judeo-cristiana e islámica, incorpora elementos gnósticos, y creen en la reencarnación, en la causa y efecto, en el libre albedrío y en la responsabilidad y la moral.

   Los Unitarios Druzos creen y respetan en profetas como Adam, Noé, Abraham, Jethro, Moisés, Jesucristo, y Mahoma, incluso en Hermes Trimegísto, el faraón Akenatón o Akhenaton, Platón, Plotino, entre muchos otros.  Además tienen un conjunto de "sabios" que fundaron la religión en el siglo XI., entre ellos el mismo Hakem Bi Amrillah, el maestro e imam Hamza Bin Ali, el maestro Muqtana Baha Edwin, así como santos venerables o seres de luz, como el mismo Jethro (Nabi Shouaib, Nabi Ayoub (Job). Sayid Abdalah al Tanoukhi, Sitt Shaawano, Sit Zahar, Shaij Abou Hassan Aref Halawi, Shaikh al Fadel Mohammad Abi Hlál, Nabi Ayoub y Nabi Shueib, entre muchos otros

 

   Desde la creación de la humanidad (estamos hablando de miles de años antes de esta era), todas las religiones han reconocido el unitarismo. Se originó, prosperó, maduró y se desarrolló bajo el islamismo, cristianismo y otras religiones o fe.

   El unitarismo existe en los fieles de todas las religiones, a las cuales precede, se apoya en el conocimiento y en el camino que a él conduce.

   Los unitarios o Muwajeddin existen desde tiempos remotos, pero que en el siglo XI se hizo un nuevo Llamado Divino a la Doctrina del Tawhid en tiempos del Califa Hakem Bi Amrillah en Egipto. Antes de ese llamado y antes de otros llamados anteriores, los unitarios o Muwajeddin han existido siempre, y hoy día están presentes en todo el Mundo. A los del Medio Oriente se les llama “Druzos” o “Drusos”.

  Ciertamente que los drusos del Medio Oriente son de raza árabe o semita, pero esto no quiere decir que la fe o doctrina del Tawhid sea musulmana, solo es que históricamente los unitarios druzos se iniciaron en Egipto durante el Llamado a la nueva Era en el seno del imperio fatimita, netamente musulmán chiita, pero que tras la desaparición del Califa Al-Hakim Bi-Amrillah, se inicia la persecución contra ellos por los musulmanes, por lo que se ocultan en las montañas de la hoy Líbano y de allí se extienden a Siria y Palestina. El otro motivo de que se les catalogue como musulmanes, es que muchos unitarios se unieron a los chiítas, quienes eran la gente de la interpretación alegórica del libro sagrado islámico, el Corán, y siguieron a estos, más aún con la secta ismaelita, una secta musulmana con muchos unitarios ocultos, y quienes con el tiempo originaron a los fatimitas, quienes fundaron un califato en el nombre del África y fundaron a la ciudad de El Cairo, que la convirtieron en su capital.

   En aquella época, los drusos eran un grupo multiracial, pertenecientes a familias que provenían de Egipto, Persia, de los árabes del Yemen, Irak y Al-Hijazz, del norte de Siria y de la región de Kurdistán, de Mesopotamia y de la Antigua Anatolia (hoy Turquía), quienes se establecieron en las regiones orientales del Mar Mediterráneo, en las estribaciones del Monte Líbano, de la antigua Fenicia, para entonces denominadas por algunos escritores como Sham o Tierras del Shem,  pero realmente se instalaron en las estribaciones del Monte Líbano, del Monte Hermón y del valle o Wadi At-Taym, a los pies de la ladera occidental del Monte Hermón, hoy Líbano, y no como lo sostienen algunos escritores drusos de que pertenecen solamente a familias árabes provenientes del Yemen, Irak y Al-Hijazz. Esta última aseveración es cierta ya que antes del cierre del Llamado en el año 1043 y posterior a ese año, muchos árabes llegaron de esa región y se convirtieron a la Doctrina Unitaria Druza.

   Para finalizar y apoyar el origen antiguo de la Religión se debe añadir que la Doctrina de los drusos (Unitarios o Muwajeddin) es una filosofía que proclama la Mente Universal como la razón primordial de nuestra existencia, pero sobre todo en la creencia de Dios Único y sempiterno.

EN LOS ALBORES DE LA CIVILIZACIÓN.  

   El Cercano Oriente, también conocido como el Creciente Fértil o Media Luna Fértil, engloba a los países antiguos del Medio Oriente como Fenicia, Mesopotamia, Asiria, Galilea, los Pueblos del Mar o Filistea, parte de Arabia  y Egipto, cuyas tierras son bordeadas por los grandes ríos del Nilo, Éufrates y Tigris, las montañas del Líbano,  las montañas de Anatolia y los Montes Zagros, le han dado ese toque de fertilidad, en una gran región desértica, y sobre ellas se asentaron los pueblos que darían origen a dos grandes culturas. Pueblos ricos y prósperos gracias a la agricultura y a las inundaciones de esos ríos que fertilizan las tierras, dando origen a Mesopotamia con Sumeria, Caldea y Babilonia por un lado y a Egipto de los faraones y las grandes pirámides por el otro lado.
 
   De esta forma, el Cercano Oriente es considerado como tierra sagrada, donde se originaron los primeros pueblos civilizados del mundo y cuna de las grandes religiones monoteístas de la humanidad, tales como el de Zoroastro, el judaísmo, la cristiandad, el islamismo y sobre todo la Doctrina Unitaria del Tawhid.
 
   Tanto Egipto como Mesopotamia fueron la cuna de la civilización moderna, sin importar las antiguas razas humanas, por tanto fueron el origen de la actual civilización occidental y meso oriental, que influyeron decisivamente en la historia de la humanidad, claro está, estos dos pueblos sufrieron invasiones de razas provenientes del norte, llamase de los pueblos de raza blanca Euroasia, de los pueblos de oriente, llámese de las razas amarillas o mongoles y de la India, estos contribuyeron con la riqueza cultural de estos dos pueblos, el egipcio y el mesopotámico.
 
   En lo religioso, tanto la raza indo-egipcia como la raza árabe sintieron el llamado de Dios Todopoderoso a través de los Maestros Cósmicos o Seres Divinos Espirituales, por lo que esos territorios desérticos, aunque enriquecidos por los ríos Nilo, Tigris y Éufrates, se convirtieron no solo en la cuna de las civilizaciones desarrolladas de la antigüedad, sino también en la cuna de las religiones monoteístas, primordialmente de la Doctrina Unitaria.
 
   De esta forma, a través de los grandes Sabios Espirituales de la Antigüedad, surge la Antigua Doctrina Unitaria o del Tawhid, posteriormente conocida como Fe Druza, hace ya más de seis (6000) años, la cual fueron enseñadas su filosofía, doctrina y dogmas, primero por Maestros Cósmicos o Lumbreras (Hudud), después por mentes brillantes y benditas como Seth, Adam El-Safaa (Adán de la Pureza), Shatneil (Adam), Hermes Trismegisto (Toth o Gran Maestro Idris), el Rey Hammurabi, el profeta Jethro (Nabi Shueib), el profeta Job (Nabi Ayoub), Pitágoras, Platón, Aristóteles, Sócrates, Plotino, autor de un compendio sobre Dios, el Uno, así como de muchas de las cartas de la antigua Sabiduría Unitaria, Perménides un gran filósofo que describió también  Dios como el Uno y describió sabiamente el tema de la eternidad, el mesías Jesucristo, Juan El Bautista, Marcus y Matías en los albores del cristianismo en Palestina, en tiempos de la antigua Roma, el arcángel Gabriel, el unitario Salman el Farisi, en tiempos del profeta Mahoma, así como muchos otros seres místicos que se relacionaron con las enseñanzas unitarias.
 
   Más recientemente durante el Llamado de la nueva Era de la Verdadera Religión Unitaria, mejor conocida como el “Llamado Divino”, promulgado el 30 de mayo del año 1017 DC, por el Califa e imam Al-Hakem Bi-Amrillah, el Maestro Cósmico Hamza ibn Ali y posteriormente por el maestro Muqtana Bahaeddin, además de los maestros Isma´`il Ibn Muhammad o Abou Ibrahim (Bou Brahim)., Muhammad Ibn Wahb y Salama Ibn Al Wahhab.
 
   Los orígenes de la creación indudablemente es una obra y causa de Dios, el gran creador, el dador de la vida, de la tierra, del hombre, de los Hudud, seres divinos espirituales y de la llegada de ellos como seres físicos a la tierra, en sus diferentes oleadas o apariciones en el transcurso de la historia de la humanidad.
 
   Dios dijo: “Hágase y fue hecho”. La Divinidad, para acercarse al entendimiento humano, ha aparecido bajo varias manifestaciones. Los ciclos procedieron en eras de siete y de milenios hasta completar 343 millones de años. Claro está, en todo ese tiempo, no existió la humanidad, sino en época más reciente.

   El cosmos, el universo, la luz, las estrellas, los astros, los planetas, la vida en estos, el hombre fueron creados por voluntad de Dios, pero en esta parte de la génesis de la creación, también creó a los Principios Cósmicos (Hudud en árabe) o Entidades Luminosas, que principalmente son CINCO, como parte de las emanaciones de Dios, ellos son la Mente, el Alma, la Palabra, la Causa o Precedente y el Efecto o Siguiente, mucho antes de la llegada de las estrellas, de los planetas, de los minerales, del fuego, del agua, de la tierra, del Planeta Tierra en sí, y de la vida en ellas, sean vegetales, minerales y animales, entre ellos el ser humano, el Hombre.

 
   Según el Unitarismo Tawhid, estos Principios Cósmicos (Hudud) fueron creados en el momento por Él escogido, de Su mando y por Su luz se originó la Primera Entidad Luminosa, Al Aql, o Mente  Universal.
 
   Dios dijo a Al-Aql: “Por medio de ti Yo doy y recibo, premio y castigo”. Deslumbrado por su resplandor, y encontrándose sin adversario, la Mente Universal Al Aql se volvió vanidoso. De tal orgullo y contra su voluntad emanó la oscuridad, o sea el Adversario.
 
   Comprendiendo que este era un castigo del Señor, La Mente Universal buscó el perdón y le rogó a Dios que lo ayudara contra el Adversario. Respondiendo a la súplica, el Señor creó a Al-Nafs, o el Alma Universal, la Segunda Entidad Luminosa, para que fuera su compañero, pero entre ambos no lograron dominar al Adversario.
 
   El Oponente apareció entre la luz del Alma y la oscuridad del Adversario, al cual siguió.

   De la luz del Alma Universal nació Al-Kalima, o el Verbo, también conocido como la Palabra Universal.

   Del verbo emanó la cuarta Entidad Luminosa, Al-Sabiq o el Antecedente, también conocido como el Precedente o el Ala Derecha, que es la fuente y el orden en el universo. Este es el elemento de la vida. Es la perfección de todos los seres cósmicos, es el propio cosmos.

   De al-Sabiq surgió la Quinta Entidad Luminosa Al-Tali el Sucesor también conocido como Antecedente o Ala Izquierda, esta quinta Emanación es conocida como la Sensata Sabiduría, es una exteriorización de la voluntad de Dios en la creación del mundo corporal. Es la perfección de todos los seres corporales, comparada con la cuarta entidad luminosa que es la perfección de todos los seres cósmicos.
 
   Y a todos estos principios Cósmicos se les concedió la libertad de escoger entre el bien y el mal.
 
   De Al-Tali, o el Sucesor, emanaron las “esferas”, la tierra y los elementos, como el calor, frío, sequedad y humedad; y el quinto elemento, la materia, que sustenta al fuego, al agua, al aire y a la tierra. El núcleo central del universo es la tierra (no el planeta sino el elemento), en la cual aparecieron sucesivamente los minerales, plantas y animales. De la tierra salieron los seres humanos, en cuyos corazones residen almas racionales.
 
LA GÉNESIS DEL HOMBRE. 

   En este aparte, no discutiremos como el hombre fue creado y como se desarrollaron las distintas razas, solo podemos señalar que NO existen datos históricos que confirmen la existencia del diluvio universal. Tampoco puede ser cierto lo de Adán y Eva, menos aún lo de la raza adámica, ya que esta no puede proceder de un solo hombre

 

   En diversas regiones del planeta, de norte a sur, de este a oeste, vivieron en el pasado remoto y viven hoy día muchos pueblos, de diferentes razas y creencias. El estudio de los pueblos en cuanto concierne a su peculiaridad corporal se llama Etnología.

     Hay que dejar en claro que los Maestros Cósmicos o Hudud tienen el don del “Principio de la Ubicuidad”, o sea el de estar en varios lugares a la vez en un mismo tiempo, y al crear Dios al Ser Humano, a través de los Maestros Cósmicos, pudo haber ocurrido el uso de este Principio a la vez en distintos puntos del planeta.

 

   Fueron los Maestros Cósmicos Al-Sabiq o el Antecedente (Precedente o Ala Derecha) y de éste surgió Al-Tali o el Sucesor el Siguiente o Ala Izquierda), porque este cuarto principio es la causa de que exista el quinto. Estos dos principios; el Precedente y el Siguiente, o la perfección de los seres cósmicos y la perfección de los seres corporales son la fuente de mundo perceptible. Y a todos estos principios Cósmicos se les concedió la libertad de escoger entre el bien y el mal.

     Del Principio Cósmico  Al-Tali, o el Sucesor, emanaron las “esferas”, la tierra y los elementos, como el calor, frío, sequedad y humedad; y el quinto elemento, la materia, que sustenta al fuego, al agua, al aire y a la tierra. El núcleo central del universo es la tierra (no el planeta sino el elemento), en la cual aparecieron sucesivamente los minerales, plantas y animales. De la tierra salieron los seres humanos, en cuyos corazones residen almas racionales.

 

 

LOS UNITARIOS DRUZOS, DOS ORIGENES Y UNA SOLA RELIGIÓN.

 

Hay que estar claros, los Unitarios o Mouwajeddin a la cual pertenecen los Unitarios druzos (drusos) del Cercano Oriente, son una confraternidad religiosa de muy antigua data que reconocen a Dios Todopoderoso como ser único y sempiterno, seguidores de la doctrina Unitaria o el Tawhid.

 

Estos Unitarios Druzos, como tales, tuvieron su nacimiento en el último Llamado Divino a la Doctrina del Tawhid (Mouwajeddin) en tiempos del unitario Califa fatimí Al-Hakim Bi Amrillah en el año 1017 dentro de una atmosfera islámica chiita y con sus alrededores por una mayoría musulmana sunnita.

 

A pesar de ello, no hace a los druzos ser musulmanes, considerando que, los unitarios venían siguiendo a los imam chiítas, ocultándose entre ellos, pero trabajando incansablemente con el fin de introducir las reformas del verdadero Llamado Divino Espiritual Unitario en los textos islámicos, el cual se exacerbó con la presencia de la secta de los ismaelitas, y posteriormente con los fatimitas, hasta que el Califa Al Hakim Bi Amrilah, acompañado con el maestro Hamza Ibn Ali Al Aql o Mente Universal hicieron el verdadero Llamado Divino y develaron la real filosofía Espiritual Unitaria que luego se conoció como la Religión Druza, separándola sin temor de la religión islámica y de las otras religiones que la precedieron.

 

Por tal razonamiento, se puede hablar de dos etapas o tiempos de los orígenes de la Doctrina Espiritual Unitaria Druza:

 

·        Un origen muy antiguo en tiempos de la génesis de la humanidad, o tiempos Adámicos

·        Un origen reciente en tiempos del Califa Fatimi Al Hakim Bi-Amrillah en el 1017 DC. dentro de un entorno netamente islámico o musulmán.

 

Cada uno de ellos serán explicados oportunamente en los siguientes capítulos

 

Lo que si es necesario aclarar es que los Unitarios Druzos del Monte Líbano, donde se asentaron tras hacerse el Llamado Divino en el año 1017 D.C. son históricamente pertenecientes a varios clanes unitarios y musulmanes, árabes en su mayoría, provenientes de Egipto, del Yemen, de la antigua Irak y Al-Hijazz (hoy Arabia Saudi), quienes tras ser perseguidos por los musulmanes entre los años 1021 al 1027 y años posteriores, se ocultaron en las estribaciones y valles de las montañas del Shouf, El Maten, Kesrowen, el Wedi Al Taym y las faldas del Monte Hermón, pertenecientes a la antigua región del MONTE LÍBANO, ubicados al oeste de las regiones orientales del mar Mediterráneo, conocidas para entonces como las “Tierras del Shem”.

 

Realmente las Tierras del Shem estaban al este o al oriente de la cordillera del Monte Líbano y los Alros del Golán, donde se desarrolló Damasco y Siria, además de Jordania, mientras que las tierras donde realmente se asentaron los druzos era al oeste de dichas cordilleras, donde están la Cordillera del Monte Líbano, al norte, Monte Carmelo y Galilea al sur, junto con sus costas, Parte sur del Valle de la Beqaa y las estribaciones occidentales del Monte Hermón y parte de las mesetas de los Altos del Golan ((Yulen)

 

Los escritores drusos señalan que la mayoría de los unitarios drusos “supuestamente” descienden de las familias o clanes (tribus) árabes como los Monzer, Lakhn, Kohtan, Adnan, Rabiah (Rabeea), Wael, Thaalaba, Murra, Tai, Shiban y Záeda, entre otros, es en parte cierto.

 

Pero NO TODOS los drusos del antiguo Monte Líbano eran descendientes de familias árabes quienes en ese momento del Llamado aceptaron la Doctrina Unitaria, ya que los unitarios drusos que se extienden en Líbano, Jordania, Galilea (Israel) y Siria, también descienden de familias de antiguos linajes de iniciados de la antigüedad, quienes estaban dispersos por las arenosas soledades de Egipto, Arabia Pétrea, Palestina y los impenetrables bosques de Abisinia, de Persia, Mesopotamia o Babilonia, e incluso de la gran Península de Anatolia (hoy ocupada por Turquía y la región de Kurdistán.

 

La religión 'Tawhid' ha derivado buena parte de su sabiduría y filosofía de la cultura mesopotámica, egipcia, griega, de la sabiduría india, e incluso del más reciente sufismo, por lo tanto, los Unitarios o Muwajeddin son de origen muy antiguo, dando su esplendor y dejando sus raíces en el Egipto faraónico, en la Grecia antigua y clásica, en Mesopotamia, e incluso en la India, de allí que se señala erróneamente que la sabiduría deriva de esos pueblos.

 

Eso es tan cierto que, desde tiempos remotos subsisten como una oculta confraternidad, con una jerarquía de dignatarios y signos o símbolos secretos, que por peculiares procedimientos didácticos enseñaron las ciencias, religión y filosofía.

 

Es por esta razón, de que antes de ser llamados los unitarios como druzos (drusos), existen desde los confines del mundo, desde el momento de la creación, en donde todas las religiones que fueron apareciendo sucesivamente en el transcurso de la historia han reconocido el unitarismo, o la existencia de DIOS ÚNICO y sempiterno, llámese Dios, Allah, Shams o en cualquier otra forma y en cualquier otro idioma.

 

Pruebas hay muchas, y a ellos se referirá en la presentación de estos capítulos de este trabajo, pero cabe recordar que los estudiosos, ancianos religiosos y hierofantes, nombran a menudo en sus charlas y discursos a Shanteel, Hermes el Haramza (Hermes Trismegistos), Akhenaton, Platón, Plotino, Jethro o Nabi Shuéib, Job o Nabi Ayoub, Salman al Farisi y muchos otros como nuestros SADETNAS, o Lumbreras o HUDUD alabado sean sus nombres, en el pasado lejano.

 

No hay que olvidar que uno de los máximos líderes de la Religión Unitaria que ha dejado su huella en la historia druza durante el siglo XX, como lo fue el Shaij al Aql del Líbano, Mohammad Abou Chakra, declaró y escribió que: “Desde la creación, todas las religiones han reconocido el unitarismo. Se originó, prosperó, maduró y se desarrolló bajo el islamismo, el cristianismo y en otras religiones”, además señaló que: “El unitarismo existe en los fieles de todas las religiones, a las cuales precede”.

 

Estas palabras pronunciadas por el Shaikh Mohammad Abou Chacra dan a entender muy claramente el origen antiguo de la Doctrina Unitaria Druza o Tawhid, y como tal fue recopilado en el libro “La Fe de los Drusos simplificada para la Juventud” (Faith of the Druze simplified for the Youth) del Moustafa F. Moukarim, publicado en inglés y español en febrero de 1986.

 

Otro Unitario Druzo como el Sheikh Bahjat Ghaith Sheikh Ghaith valiantly carried the flame of Mashiakhat El-Aql (The Highest Spiritual Druze Leadership)for15 years (against all odds and obstacles), and withdrew in 2006 voluntarily from his position crowning a life-long journey of trials, tribulations and sacrifice on all levels for the sake of preserving The Brotherhood quien portó valientemente la llama de Mashiakhat El-Aql durante 15 años retirándose voluntariamente en 2006, para dedicarse e sus trabajos, escritos, manuscritos y libros publicados, además de la red virtual Druzenet.

 

El Sheikh Bahjat Ghaith rompió el Silencio Milenario que nos ha envuelto como una comunidad de hermandad reunida bajo el Juramento Sagrado y el Cinco de la bandera de colores y se presentan a un mundo cada vez más pequeño, más difícil de ocultar y completamente intolerante a esa forma de conservadurismo ciego, ya que según él y sus seguidores creen como drusos, no tienen nada que ocultar que no haya sido revelado de una manera u otra, señalando que la doctrina Unitaria Druza son atemporales y universales, y fueron enseñadas por mentes benditas como Pitágoras, Platón, Aristóteles, Sócrates, Parménides, Hermes Trismegisto y Seth, hace miles de años, y por lo tanto nuestra identidad espiritual no es ninguna amenaza a ningún cuerpo u otra filosofía.

 

 

LOS UNITARIOS DRUZOS, DOS ORIGENES Y UNA SOLA RELIGIÓN EN SU PRIMERA ETAPA.

Ya se señaló con anterioridad que los Unitarios drusos de hoy tienen dos etapas o Ciclos o Tiempos históricos de los orígenes de la Doctrina Espiritual Unitaria Druza, a saber:

·        Un origen muy antiguo en tiempos de la génesis de la humanidad, o tiempos Adámicos

·        Un origen reciente en tiempos del Califa Fatimi Al Hakim Bi-Amrillah en el 1017 DC, dentro de un entorno netamente islámico o musulmán.

 

A pesar de ello, en su última etapa no los hace ser musulmanes, a pesar que los unitarios venían siguiendo a los imam chiítas, el cual se exacerbó con la presencia de los ismaelitas, y posteriormente con los fatimitas, hasta que el Califa Al Hakim Bi Amrilah, acompañado con el maestro Hamza Ibn Ali Al Aql o Mente Universal hicieron el verdadero Llamado Divino y develaron la real filosofía Espiritual Unitaria que luego se conoció como la Religión Druza, separándola sin temor de la religión islámica y de las otras religiones que la precedieron.

Analizaremos en este capítulo la primera etapa u origen identificado como “Primer Origen” que es “Un origen muy antiguo en tiempos de la génesis de la humanidad, o tiempos Adámicos”

 

PRIMER ORIGEN.

 

  La religión Unitaria ha derivado buena parte de su sabiduría y filosofía de la cultura mesopotámica, egipcia, griega, de la sabiduría india, e incluso del más reciente sufismo, por lo tanto, los Unitarios o Muwajeddin son de origen muy antiguo, dando su esplendor y dejando sus raíces en el Egipto faraónico, en la Grecia antigua y clásica, en Mesopotamia, e incluso en la India, de allí que se señala erróneamente que la sabiduría deriva de esos pueblos.

  Eso es tan cierto que, desde tiempos remotos subsisten como una oculta confraternidad, con una jerarquía de dignatarios y signos o símbolos secretos, que por peculiares procedimientos didácticos enseñaron las ciencias, religión y filosofía.

  Realmente los Muwajedun tienen sus orígenes en la fraternidad iluminada de la GRAN LOGIA BLANCA, nacida en Egipto durante los años anteriores al reinado del Faraón Akhenaton, quien mantuvo y estimulo la existencia de esta fraternidad unitaria y secreta en un país fuertemente politeísta para enseñar las verdades espirituales y místicas de la vida.

   Esta Gran Logia Blanca tuvo sus bases firmes con los grandes volúmenes y escritos del también egipcio Hermes Trismegisto

  La gran fraternidad unitaria era una organización no sectaria y su plan fue congregar a los hombres y mujeres más sabios de Egipto, y del mundo conocido, con el objeto de discutir, analizar, escribir y conservar el profundo conocimiento que constituyó la Luz del Mundo.

  Durante los diez siglos anteriores a la venida de Jesucristo, se establecieron ramas de la gran fraternidad blanca con diversos nombres y en varias partes del mundo, pudiéndose citar a la Hermandad de Luxor, la Hermandad del Sol (Shams), los Esenios en Galilea, y varios siglos después los Ismaelitas en el Medio Oriente quienes dieron origen a la secta Fatimita que se instaló en el norte del África y fundó la ciudad de El Cairo y la hizo capital de su naciente imperio.

  Es por esta razón, de que antes de ser llamados los unitarios como drusos o drusos, existen desde los confines del mundo, desde el momento de la creación, en donde todas las religiones que fueron apareciendo sucesivamente en el transcurso de la historia han reconocido el unitarismo, o la existencia de DIOS ÚNICO y sempiterno, llámese Dios, Allah, Shams o en cualquier otra forma y en cualquier otro idioma.

  Muchos maestros cósmicos se han encargado en hacer conocer el conocimiento sobre la verdad de la existencia de Dios, único y sempiterno, a través de ciclos durante siglos. Muchos de esos ciclos y muchos sistemas religiosos siguieron uno después del otro, gracias al advenimiento de mentes benditas, como Adán hace más de 6000 años, llamado en las escrituras unitarias como Shaatnil, quien era una encarnación del Aql o Mente Universal.

  En el período de la aparición de Adam, se conoce como el “Tiempo Adámico” o la Era adámica apareció en varios ciclos seguidos, recuerden que son Seres Divinos, que, aunque físicos, pueden fallecer y vuelven a la vida de nuevo hasta completar su tarea, y las apariciones se iniciaron del Maestros (Hudud) Adán o Adam, hace más de 6000 años, llamado en las sagradas escrituras unitarias como Shatneil, o Shanteel (Shatneil El Hakim), quién era una encarnación del Aql (Mente Universal) en esa época antigua.

  En una de sus primeras venidas de la Mente Universal o al-Aql, se le conoció como Adam El-Safaa (Adán de la Pureza), ocupando el Trono del Espiritual y llegó siendo aún como un ente espiritual y encarnó por primera vez como la Mente Total.

  Luego Adam le toco venir de nuevo como la Mente Universal, acompañado de Enoch y Seth, de las entidades físicas de la Mente Universal, el Alma Universal y la Palabra, de los tres primeros Hudud.

  En ese período Adámico, Enoch se le conoció como Enoch El-Wafaa (Enoch de la Pureza), siendo la encarnación del Alma Universal, y fue conocido en otras venidas como Eva, Sophia y Hermes Trismegistos, en los tiempos antiguos..

  El Gran Maestro, Hermes El Haramsi, conocido en el antiguo Egipto como Thoh o Idris, o Hermes Trismegisto por los griegos y latinos. Hermes El Haramsi, el Tres veces Sabio o Grande, quien existió hace aproximadamente hace unos 7000 a 9000 años (no se precisa), otros señalan que fue hace 5000 años, es el Profeta de los profetas conocido por los Unitarios como El Maestro del Espiritual el “Alma Universal” (Al Nafs), o la encarnación del espíritu universal. Igualmente se le conoce como  Sayadna Idris (Nuestro Gran Maestro Idris) como se le denomina en el libro sagrado del Cor´an (Corán).

  Hermes Trismegisto fue un gran avatar que vivió en ese Egipto de la antigüedad, que estuvo presente en el reinado de los tres primeros faraones de la primera dinastía (La dinastía I gobernó aproximadamente entre 3000 y 2890 AC), fue a él quien se debe las misteriosas enseñanzas herméticas, y de allí el riguroso secreto, o hermetismo (de su nombre derriba) de sus enseñanzas. Incluso se le atribuye el diseño de la arquitectura de las primeras pirámides en ese país, de allí su nombre árabe de Haramsi que quiere decir “De las pirámides”.

  Hermes es el Profeta de los profetas conocido por los Unitarios como El Maestro del Espiritual (Al Nafs o Alma Universal), o la encarnación del espíritu universal, fue un gran Maestro Cósmico Unitario, sabio, alquimista y profeta, Otros autores le identifican como el Maestro de Maestros, ya que fue capaz de interpretar fehacientemente la palabra o el mensaje de Dios o los dioses para los historiadores y, así mismo, el encargado de mediar ante los dioses para ofrecer testimonio acerca de la existencia de la divinidad (Dios).

  Se le señala, además, que Hermes El Haramsi especie de divinidad unitaria, gran iniciador de las clases sacerdotales en Egipto y por consiguiente, el depositario de las tradiciones iniciáticas y ocultas de esa civilización. A Hermes se lo compara con la divinidad suprema, es decir, con Dios.

 

  Pero en el Egipto faraónico, Hermes Trismegisto no fue el único gran unitario, también lo fue el Faraón Akhenatón, que llegó encarnado como el Alma Universal (1372 – 1336 AC), quien fue el primer gobernante que instauró la creencia de Dios Único, con el nombre egipcio de Atón,

  Akhenatón fue el décimo faraón de la dinastía XVIII de Egipto. Su reinado está datado en torno a 1353-1336 a. C. y pertenece al periodo denominado Imperio Nuevo de Egipto. Hacia el cuarto año de su reinado, cambió su nombre a Neferjeperura Ajenatón.

  Akhenaton tomo su monoteísmo, que su padre también practicaba, al igual que su abuelo, de la tradición legada por los hiksos, aunque su dinastía los combatió hasta obligarlos a que aceptaran las leyes de Egipto. A pesar de ello Akhenaton, quien sentía una voz interna que le inspiraba y comenzó a predicar su religión, derrumbó los ídolos, pero no pudo vencer el fanatismo del pueblo avivado por los sacerdotes, quienes le atacaban despiadadamente y le insultaban, siendo el un Faraón.

  Por esa razón Akhenatón tuvo que abandonar la capital del país y fue a construir la suya propia, el Tell Al Ammarnah; atrajo a la ciudad a sus adeptos, luego la embelleció y la dotó de comodidades.

  Su reinado no sólo implicó cambios en el ámbito religioso, sino también reformas políticas y artísticas. Entonces comenzó a componer los salmos de la religión monoteísta, unitaria, que para él era nueva, y dictar sus leyes; estos salmos son en letra y sentido iguales a los de la Biblia, atribuidos a Moisés, teniendo en cuenta que Akhenatón murió 200 años antes que Moisés.

    Esta nueva prueba demuestra otra vez que Moisés tomó las escrituras y su religión de los Unitarios árabes, y quien más que de su maestro y guía Jethro o Nabi Shouaib, quien fue su suegro al casarse con su hija mayor Sefora.

  Así como estos grandes maestros, están también el mismo Jethro (Nabi Shueib) sacerdote unitario de Madian, Job (Nabi Ayoub) en la antigua Fenicia (Líbano) Pitágoras, Parmalides, Platón, Plotino, Jesucristo, Juan El Bautista, Salmen El Persa y muchos otros hasta llegar a los tiempos del Llamado Divino en el año 1017 D.C. en tiempos del Imperio Fatimita en Egipto y sus alrededores.

 

 

 

 

LOS UNITARIOS DRUZOS, DOS ORIGENES Y UNA SOLA RELIGIÓN EN SU SEGUNDA ETAPA.

 

  Se explicó con anterioridad que, los Unitarios drusos de hoy tuvieron  dos etapas o Ciclos o Tiempos históricos de los orígenes de la Doctrina Espiritual Unitaria Druza, a saber:

 

·        Un origen muy antiguo en tiempos de la génesis de la humanidad, o tiempos Adámicos

·        Un origen reciente en tiempos del Califa Fatimi Al Hakim Bi-Amrillah en el 1017 DC, dentro de un entorno netamente islámico o musulmán.

 

  También se señaló que en su última etapa no los hacia ser musulmanes, a pesar que los unitarios venían siguiendo a los imam chiítas, el cual se exacerbó con la presencia de los ismaelitas, y posteriormente con los fatimitas, hasta que el Califa Al Hakim Bi Amrilah, acompañado con el maestro Hamza Ibn Ali Al Aql o Mente Universal hicieron el verdadero Llamado Divino y develaron la real filosofía Espiritual Unitaria que luego se conoció como la Religión Druza, separándola sin temor de la religión islámica y de las otras religiones que la precedieron.

 

  En este capítulo la segunda etapa u origen se ha identificado como “Segundo Origen” que es “Un origen reciente en tiempos del Califa Fatimi Al Hakim Bi-Amrillah en el 1017 DC, dentro de un entorno netamente islámico o musulmán”.

 

 

SEGUNDO ORIGEN.

 

  Los Unitarios Druzos, como tales, tuvieron su nacimiento en el último Llamado Divino a la Doctrina del Tawhid (Mouwajeddin) en el Egipto Fatimita, durante el año 1017 d.C., para ello, previamente, los unitarios se ocultaron aplicando la ley del Taqqiya o el “arte del disimulo”, haciéndose pasar como musulmanes, sin olvidar que uno de estos unitarios fue un hombres de confianza de Mahoma, Salman Al Farisi (Salmen el Persa), quien era el verdadero ser de Luz, ya que fue la Mente Universal en ese tiempo, y fue quien enseño las sagradas escrituras al profeta Mahoma en sus supuestos sueños en su retiro en una cueva cercana

 

  Ya en tiempos de Mahoma se vislumbraba una separación dentro del islam en dos grupos, los sunnitas y los chiítas.

 

  Los Sunnitas fueron quienes se integraron al sentido literal del Corán, por lo que se les conoce como la gente de la revelación (ahl al tanzil), mientras que los chiítas interpretaron el Corán alegóricamente, por eso se les llamó la gente de interpretación alegórica (ahl al ta´wil). Pero también había otras diferencias entre ellos que los distanciaban cada vez más una de la otra, era el tema del guía de la comunidad, los Sunnitas consideraron que el jefe de la comunidad era el sucesor de Mahoma, y fue llamado Califa quien era el que iba a implementar la ley religiosa (ash-shariá), en la defensa de la comunidad y en la expansión del islam, y su cargo debía ser ocupado por elección.

 

  Por otro lado, los Chiítas no estaban de acuerdo con el Califa si no que para ellos el guía debe ser un Iman o Imam, además le sumaron a sus funciones, además de jefe de la comunidad, que el imam tenía que interpretar el Mensaje Divino de acuerdo a las necesidades del momento, por lo tanto, el imam es el que responde las preguntas hechas por el hombre, esto viene a significar que este imam es una persona divinamente iluminado, cuyo conocimiento divino pasó a él a través del profeta (¿?). Por lo tanto, la interpretación alegórica es entonces para los chiítas una continuación de la revelación divina.

 

  Tras la muerte de Mahoma, surge el sisma del islam entre Sunnitas y Chiitas. Los Unitarios de aquella época que existían ocultos entre os musulmanes de Persia, Mesopotamia, Arabia, Monte Líbano y Egipto, siguieron a la fracción de los Chiítas cuyo líder era un Iman, quienes interpretaban las escrituras del Corhan (Coran), Los Unitarios eran parte de los que interpretaban las escrituras, y se hicieron más evidentes con los ismaelitas.

 

  Después de la muerte de Mahoma el 8 de junio de 632 D.C. los Sunnitas eligieron a un compañero del profeta que se llamaba Abu Bakr como Imam y Califa de la comunidad, mientras que los chiítas quienes no aceptaron esta elección, fueron forzados a reconocerlo como el líder.

 

  Los chiítas consideraban a Ali ibn Abi Talib quien era el primo hermano de Mahoma y yerno al mismo tiempo, al estar casado con la hija del Profeta, Fatima, como el verdadero Imam, por lo tanto, consideraban a Abu Bakr como un usurpador, mientras que ellos decían que Ali fue designado al imamato por el mismo Profeta.

 

  Es así que los chiítas continuaron el proceso de la interpretación. De este modo las dos fracciones se hicieron más distantes la una de la otra. Los Chiítas se caracterizaron en la interpretación alegórica del significado del Corán, dándole un contenido esotérico y los sunnitas se caracterizaron por integrarse a las enseñanzas de sus antecesores en la interpretación 

 

  Los chiítas creían firmemente que la Ley religiosa debía ser interpretado por un ser iluminado y este era Ali, y sus descendientes, es así que después de muerto Ali paso el imamato a su hijo Hassan, después de éste morir paso al segundo hijo de Ali, Hussayn. Al morir Husseyn ibn Ali el Imamato pasó a Ali Zayn al-Abidin

 

  Ocurre la primera división entre los chiítas tras la muerte de Ali Zayn por diferencias en sus creencias en el recipiente de la luz divina del Imamato. Los Zaydis consideraron a Zayd, hijo de Ali Zayn al-Abidin como su imam, mientras el resto siguió a Muhammad también hijo de Ali Zayn al-Abidin, conocido como Muhammad al-Baqir.

 

  A pesar del cisma chiíta, los seguidores de Muhammad al-Baqir al morir siguieron a su hijo Jafár o Ja´far, conocido como as-Sadiq, y al morir éste, otra división ocurre entre sus seguidores, por desacuerdo en la divinidad.

 

  Ismail (Isma´il), el hijo mayor de Ja´far as-Sadiq fue designado como Imam por su padre, pero Ismail fallece antes de morir su padre en el año 752 D.C. en consecuencia, una fracción chiita rindió lealtad a un hermano de Ismail, cuyo nombre era Musa al Kasim, mientras que el  otro grupo consideró que el Imamato no podría regresar y ser entregada a su hermano Musa, después que Ismail había sido designado por su padre. Así consideraron al hijo de Ismail, también llamado Muhammad ibn Ismail como su Imam, esta fracción es conocida como los Ismaelitas.

 

  Hubo otras diferencias de naturaleza más filosófica y teológica que eran de mayor importancia. Y según los escritores de la época fueron el resultado de las influencias de varias escuelas del pensamiento, que eran importantes en toda la sociedad, después de las traducciones al árabe de los grandes trabajos de los filósofos griegos y no griegos tales como Platón, Aristóteles y Plotino, todos ellos grandes sabios y filósofos Unitarios.

 

  Al mismo tiempo los musulmanes estaban traduciendo y adquiriendo pensamientos persas e hindú, sin olvidar mencionar los escritos del gran unitario Hermes Trismegistos del antiguo Egipto.

 

  Al principio, el Corán fue concebido según su significado aparente, pero por las influencias griegas, siriacas, persas e hindúes, los pensadores comenzaron a interpretar los significados e investigar los objetivos antiguos más remotos, por lo que condujo a muchos teólogos ir más allá del principal cuerpo del islam, y tengan por seguro que muchos de estos teólogos no solo eran musulmanes, sino también habían varios unitarios entre ellos.

 

  Elementos no tradicionales del islam comenzaron a infiltrarse en las creencias religiosas y una emancipación de la interpretación del tipo dogmático comenzó a ser más notable, y esto se vio más entre los seguidores de la rama Ismaelita una de las ultimas divisiones de la fracción chiíta.

 

LA EVOLUTIVA TRANSICIÓN DEL ISLAM MÍSTICO AL UNITARISMO O TAWHID

 

   En todas las leyes religiosas y los pasos de la humanidad en las distintas religiones, aquellos quienes alcanzaron la sabiduría verdadera sobre la existencia de Dios y su unidad, habían sido entrenados para la disciplina aceptando el islam en sus deducciones o implicaciones exotéricas e imposiciones rituales, pero solo una parte de los musulmanes habían sido entrenados por el significado interno (batin) del Mensaje Divino. Estos eran los unitarios ocultos dentro del Islam quienes habían aceptado al Fundador o Imam.

 

   En estas etapas de interpretación alegórica, los verdaderos creyentes en el Mensaje de Dios estaban siendo preparados para experimentar una unión con Dios. Después que la sabiduría divina había sido interpretada en formas alegóricas por un número de imams chiítas, los verdaderos creyentes en la unidad de Dios estaban motivados para el siguiente gran paso, en el cual recibirían algo más que la interpretación alegórica del Mensaje Divino.

 

   En este nuevo período, los verdaderos creyentes, una vez más experimentaron a Dios a través del hombre ideal quien es el Imam, “Cuyo Ejemplo ha de Seguir”, no obstante la labor de este imam Unitario era diferente a la del imam musulmán chiita, ya que la labor de este último era simplemente la interpretación alegórica del Mensaje Divino.

 

   Por lo tanto, en la siguiente etapa que implantó Dios a través de los seres divinos o Maestros Cósmicos (Hudud), que se conoce como la fe o la verdadera Doctrina Unitaria de Dios, al-Tawhid, el hombre experimento (y aun experimenta) a Dios por medio de su propio entendimiento, la palabra Imam se convirtió en una manifestación para la humanidad ideal, por lo cual el hombre vino a ser un ser efectivamente. El hombre sólo puede comprender a Dios a través del verdadero Imam.

 

   Bien lo señalo el Maestro Unitario Hamza Ibn Ali en uno de sus versículos: “Si entre los seres hubiese algo superior a la categoría de Imam, entonces nuestro Señor, desde un punto de vista objetivo, se hubiese manifestado a través de éste” Epístola 19 del Libro Sagrado Unitario el “Hekmi” (Al-Hikma).

 

   De allí, cuando el hombre experimenta a Dios lo hace a través del Imam verdadero, quien es la Estación (maqam). A través de esta estación Dios se revela al hombre de la misma forma que una palabra es una estación en la cual un significado es manifestado.

 

   En tiempos del Islam, los imams chiitas, en particular los ismaelitas y fatimitas, fueron los verdaderos imams quienes han aparecido a través de toda la historia, cada uno en una etapa, son los ejemplares quienes deben ser seguidos, donde el el verdadero creyente es armonizado hasta el infinito; la verdad del creyente se une con Dios, quien abarca a todo ser.

 

   En esta etapa de los imams, tras pasar los imams religiosos chiitas, los cuales los unitarios siguieron sus pasos fueron al-Husayn hijo de Ali Ibn Abi Talib y Fátima (la hija del profeta Mahoma), luego vino Ali Zayn al-Abidin, Muhammad al-Baqir, Ismail (quien fue el fundador de los Ismaelitas), Muhammad ibn Ismail, y a partir de él, los imams verdaderos estos se ocultan, ya que eran unitarios escondidos bajo la figura de musulmanes, o eran musulmanes unitarios que no seguían a los imams chiitas, se convierten en los Imams Ocultos, pero junto a ellos estuvo otro imam verdadero, Abu Zakariyya, seguido a él la estación se llamaba Aliyy, luego vino al-Mu´ill, quien estuvo paralelo a los imams ocultos, luego al-Mu´ill puso temporalmente a cargo del imamato a Ubaydallah al-Mahdi, o simplemente al-Mahdi, quien fue el último imam oculto, y quien comenzó otro paso en la interpretación alegórica, quien a pesar no era la verdad en sí, fue necesario para la preparación de los creyentes en la sabiduría pura de Dios.

 

    Si analizamos, podemos apreciar varias divisiones de los chiitas en el transcurso de la historia, debido a que un grupo no iban detrás del imam verdadero y otros si, de allí que se dividen en las fracciones, la primera división de los chiitas fue por la diferencia en sus creencias en el recipiente de la luz divina del imamato, los seguidores de Ali Zayn o Zaidis siguieron al hijo de Zayd, mientras que el resto, entre ellos los unitarios siguieron a otro hijo, llamado Muhammad al Baqir y luego siguieron al hijo de éste último, Jafar, conocido como as-Sadiq, pero al morir éste otra división ocurre entre sus seguidores.

 

   Ismail, hijo de Jafar, el imam designado, había muerto, mientras su padre aún vivía aproximadamente en el año 135 DH o 752 DC. En consecuencia, una fracción rinde lealtad a un hermano de Ismail, era Musa al-Kasim, mientras otro grupo consideró que el imamato no podía regresar y ser dada a Musa, después de que Ismail había sido designado por su padre. Asi que consideraron a Muhammad ibn Ismail, hijo de Ismail como su Imam, de esta forma nace la fracción de los Ismaelitas. 

 

   El Ismailismo es una de las corrientes del islam chií. Sus miembros son llamados también «septimanos». No reconocen más que los siete primeros imanes  creando la persecución de los chiitas sobre los ismaelitas, por lo que sus imams se ocultan

 

 

                                      Expansión del islam en tiempo de los califas

LA EVOLUTIVA DEL ISMAELISMO MÍSTICO AL UNITARISMO DRUZO O DEL TAWHID PURO.

    Las diferencias entre los grupos chiitas, creció, ya que no se limitaba sólo a los desacuerdos en la sucesión, otras diferencias de naturaleza más filosófica y teológica eran de mayor importancia. Debido a la influencia cada día mayor de la filosofía Unitaria o Tawhid dentro de las fracciones islámicas, comenzó a surtir efecto dentro del Islam, al igual que los pensamientos y escuelas herméticas, y de los filósofos unitarios griegos, tales como Platón, Aristóteles y Plotino, entre otros.

   Por las influencias señaladas de los unitarios, los pensadores siguieron interpretando los significados e investigar los objetivos más remotos, antes del Islam. Esto condujo a muchos teólogos ir más allá del principal cuerpo del Islam, y así elementos no tradicionales comenzaron a infiltrarse en las creencias religiosas y una emancipación de la interpretación de tipo dogmático comenzó a ser más notable

    De este grupo de los escindidos del Islam, sobresalen los Ismaelitas,  quienes rendían obediencia y lealtad a un imam religioso o espiritual diferente al político y al califa mismo, gobernante de los musulmanes sunnitas, por lo cual fueron perseguidos y obligados a operar secretamente y esconderse, más aún por sus creencias esotéricas, las cuasles diferían ampliamente de aquellas prevalescientes de la doctrina islámica, los obligó a no divulgar sus creencias públicamente y probablemente después de Muhammad Ibn Ismail quienes siguieron en sucesión, permanecieron escondidos, y a estos imams se les conoce como los Imams Ocultos.

  Años después, el movimiento ismaelita volvió abrirse públicamente cuando el imam Ubaydalla al-Mahdi conocido después como al-Mahdi Billah alcanzó poder luego de escapar de la persecución de oos sunnitas abasidas en Siria y huyó al norte del África donde fundó el Califato de Fatimita en el año 909 DC.

  Ciertamente que a este imam, al-Mahdi, fue primordialmente confiado para el establecimiento de un verdadero estado político y en consecuencia, ese año de 909 DC Ubaydalla al-Mahdi lideró las fundaciones de los estados fatimitas en el norte de África como se señaló..

   De esta forma, después que el estado Fatimita había sido establecido, los creyentes en el Mensaje de Dios volvieron a sus experiencias de la Divinidad. La estación ahora sería dirigida hacia su verdadero conocimiento por Qaim bi-Amrillah, el primer fatimita en convertirse en Imam Verdadero para gobernar efectivamente sobre un reino terrenal, y su reino como Imam y Califa del Estado Fatimita comenzó en el año 934 DC, luego le siguió al-Mansur Billah en el año 946 DC, después vino al-Muizz li Dinilla quien conquistó Egipto y fundó a la ciudad de El Cairo, que hizo su capital del estado fatimita, después vino Al-Aziz Billah que se convirtió en Califa e Imam en el 975 DC y finalmente fue al-Hakim Bi-Amrillah el último Imam gobernante en el estado Fatimita en el año 996 DC.

   Fue a través de Al-Hakim Bi-Amrillah que el significado de Dios le fue revelado al hombre. Con el Califa Al-Hakim el mensaje Divino alcanzo su última etapa.

   A partir de ese año, con este Califa Imam estaba completamente preparado para que los creyentes conozcan la verdad, y con él no hubo más necesidad de un Imam cuya función era transmitir conocimiento alegórico, por eso al-Hakim dejo de ser Imam.

   De esta forma el día 1° de Muharram del año 408 DH o en el atardecer del jueves 30 de mayo de 1017 DC al Hakim Bi-Amrillah anunció el comienzo de la nueva era, estableciendo mediante un decreto la liberación del hombre de las causas del miedo y temor, dándoles libre voluntad para renunciar a las anteriores creencias y doctrinas, en este caso el Islam y creencias anteriores como el judaísmo y cristianismo. Y declarar la nueva creencia en la Doctrina Unitaria o At-Tawhid en forma abierta.

   Tras esta declaración de Al-Hakim libero a los creyentes de las leyes del Islam, de esta manera, después de más de cuatrocientos (400) años de la llegada del Islam, y un poco más de un milenio del nacimiento de Cristo, es que el conocimiento verdadero de Dios y su Unidad fue finalmente revelado.

   Quienes recibieron el Mensaje de la unidad de Dios se habían estado preparando desde el comienzo del tiempo. Ahora el hombre ya no estaba obligado a seguir los ritos del Islam, ya que esta fe religiosa llegó a su máxima realidad, que es el Tawhid. Orar cinco veces al día desarrolló un constante estado de condición. El Mensaje Divino también estaba libre de esa conducta figurativa de rezar cinco veces al día que creó gruesas cortinas de formas materiales y superficiales.

   Ahora, los creyentes eran capaces de entender que estaban absorbidos en un estado de sentimiento de unidad con Dios Cuando cada uno de los creyentes se descubrió verdaderamente así mismo, fue capaz de ver a Dios, como cuando él se mira a un espejo y ve su propia imagen.

 

  Al anochecer de ese mismo día 30 de mayo de 1017, el maestro unitario Hamza ibn Ali fue proclamado como Imam del movimiento e instó a la gente para que acepten el Llamado Divino y empezó a enseñarles el conocimiento verdadero de la doctrina y teología religiosa, en particular sobre de la unidad de Dios. No se necesitaba de normas ni mandamientos rituales como las practicadas entre los musulmanes, ya que un renacimiento espiritual e intelectual había comenzado. Este nuevo renacimiento era la verdadera Doctrina Unitaria o Tawhid, posteriormente conocida por culpa de un renegado del movimiento como la religión Drusa.

   El Imam Hamza ibn Ali era para entonces, a la edad de 33 años, uno de los grandes eruditos y maestro de la espiritualidad Unitaria (era un Maestro Cósmico o Lumbrera, representado por la Mente Universal), y su sabiduría abarcaba los campos teosóficos y filosóficos, por lo que Al-Hakim Bi-Amrillah lo declaró el precursor y máximo orientador espiritual del Llamado a la Unidad de Dios (Tawhid).

   A finales de junio de 1017, a un mes de iniciado el llamado al Tawhid en el Cairo Egipto, el muwajad (unitario), Hamza Ibn Ali (al Aql), dedicó toda una epístola para establecer que el propósito de la fe no es seguir la letra ni las alegóricas y simbólicas interpretaciones de la ley religiosa, sino entender el verdadero significado de la Ley Divina literal, interno y real, lo que sería los mandamientos de la Fe del Tawhid.

 

   Realmente era el segundo mes después del comienzo del llamado, y aunque no se precisa el día, ocurrió en el mes del Safar del año 408, que coincide entre junio y julio del año 1017 de esta era.

   Todos los misioneros fueron citados para El Cairo por el nuevo Imam, quien les suministro sus conocimientos, les dio instrucciones y asignó a cada uno su rango apropiado. Luego los envió a sus destinos para que difundieran el nuevo mensaje y recibieran los votos escritos de cada persona que acepte el Llamado Divino.

   Estos votos están atados a cada creyente en la Fe Unitaria. Esto se aclara si se recuerda que por medio de la reencarnación cada druzo ha tenido el alma de uno de los cuerpos originales de quienes habían tomado estos votos escritos, pero no siempre ocurre el hecho en que todos los que hacen una promesa sean sinceros en mantenerla, ya que tenían intereses personales y haciendo la promesas pensaron que obtendrían beneficios por parte de los gobernantes.

 

FOTOS:

1. El Califato Fatimita.
2. Los cinco corceles Unitarios.
3. Al-Hakim Bi Amrillah.
4. Hamza Ibn Ali.

Representación de los cinco Hudud

Al-Hakim Bi-Amrillah

el Maestro e Imam Hamza Ibn Ali

EL SER HUMANO ES LA FINALIDAD DE LA CREACIÓN

                                                                                   

   Con la creación del ser completo, con mente, cuerpo y alma, emerge la aptitud para escoger entre el bien y el mal, y para que el alma conozca su origen divino. El ser humano es la finalidad de la creación; ha sido creado para servir a Dios y para profesar Su singularidad. Tras la creación viene el Mundo Físico, el bien y el Mal y la Reencarnación, tres puntos capitales de la filosofía del Tawhid.

   Durante la creación y posterior a ella, con la llegada del hombre a la tierra, los Hudud se han sometido a la voluntad de Dios durante todos los ciclos de vida. Un ejemplo de ello es Al Aql, la Mente Universal, el principal de los cinco Dignatarios (Hudud), apareció en diferentes eras o períodos, pero bajo diversos nombres.

 

   Con la llegada del Quinto Principio Luminoso surgió el mundo físico, de allí que el mundo fue hecho de múltiples cosas y razones, y es en su totalidad una unidad singular, que por su naturaleza evidencia la unidad de Dios.

   De esta forma Dios creo a las primeras entidades luminosas o los Maestros Cósmicos, espirituales, quienes balancearían la vida en el cosmos, y en la Tierra y los acercarían a la Unidad de Dios. Estos primeros Maestros Cósmicos eran entes espirituales y por lo tanto imperceptibles a los seres vivos, por tanto ni Dios ni las Entidades Luminosas eran perceptibles al ojo humano.

   Entre los seres vivos el ser humano es el único que posee un poder intelectual sofisticado el cual le permite, pensar, razonar, deducir o entender, aunque su entendimiento es limitado en el cuerpo, en el tiempo y el espacio. A pesar de ello, el hombre es incapaz de comprender lo que es ilimitado, por ello no puede comprender a Dios, por ser infinito y absoluto. Dios sólo puede ser comprendido como se refleje a nuestras limitadas mentes. Por eso el hombre de ninguna manera puede comprender a Dios en su realidad, para ello el ser humano fue preparado en diferentes ciclos o períodos de la vida para llegar a entender a Dios y unirse a Él.

En sus formas humanas, el Aql y los otros cuatro principios luminosos fueron dirigiendo al hombre hacia el conocimiento de la existencia de Dios Único, y por ende hacia el verdadero Mensaje Divino de la verdad y ayudándole a comprender el aspecto fenomenal de Dios a través del cual el hombre era capaz de conocer a Dios.

Al mismo tiempo los subsistemas opuestos, como el Adversario, el Oponente o Demonio, también en sus formas humanas, persistieron desde la génesis del hombre en realizar su naturaleza de discordia y contrariedad, tratando de alejarlos de su meta fundamental. De esta manera dos fuerzas opuestas  fueron motivando a la humanidad, la fuerza del bien y la fuerza del mal. 

Cada ser humano responde de diferente manera ante estas fuerzas opuestas, según su particular capacidad intelectual y espiritual, tiene un diferente grado de respuesta ya sea buena o mala, por eso quienes fueron atraídos hacia Dios alcanzaron diferentes grados de éxitos en lograr sus metas. De allí la aparición de los diferentes ciclos en las distintas épocas en la historia del mundo.

 

DIOS SE PRESENTA A LOS SERES HUMANOS.

 

   Dios en su realidad, está más allá de los límites del entendimiento humano. Por lo tanto el hombre sólo puede comprender a Dios, como Él se manifiesta, como este considerado por la mente humana. La comprensión del hombre a Dios está limitado al tiempo y al espacio, a las capacidades mentales y espirituales del hombre

 

   Este es el motivo de que Dios no se ha manifestado al hombre en persona, porque si lo hace dejara de ser Divino ante los seres humanos, y si lo hace de forma inferior, el hombre no aceptará a Dios. Por ello, Dios quiso manifestarse ante los seres humanos enviando a las entidades luminosas o Maestros Cósmicos, no como entes espirituales, sino en su forma o aspecto físico, creando así al hombre ideal.

 

Este hombre ideal es conocido por los unitarios como la “Estación” (Maqam), en el cual Dios se manifiesta al hombre, Esta imagen que es la Estación sirve para acercar al hombre hacia la Divinidad, para sentir la presencia y existencia de Dios. De esta manera la imagen humana de la estación regula el poder de la Divinidad y hace al hombre capaz de beneficiarse del conocimiento de la unidad de Dios.

 

   La magnitud del conocimiento que determinada persona puede alcanzar depende de su voluntad y la preparación que ha tenido para aceptar el conocimiento divino y de sus limitaciones intelectuales y espirituales..

 

   De esta manera, las Entidades Espirituales como el Aql o Mente Universal, tuvo una forma humana y sirvió como guía encargado de iluminar al hombre en todas las enseñanzas de Dios. El preparó al hombre para el conocimiento de la unidad de Dios y eventualmente orientó al hombre a comprender lo que pudo de la realidad de Dios.-

 

El Aql, ahora en una forma humana, fue ayudado por las subsistemas luminosas, como el Alma Universal, la Palabra o Verbo, el Ala Derecha y el Ala Izquierda, fueron dirigiendo al hombre hacia el Mensaje Divino de la verdad y ayudándole a comprender el aspecto fenomenal de Dios a través del cual el hombre era capaz de conocer a nuestro Creador.

 

Como recordatorio desde la creación y posterior a ella, con la llegada del hombre a la tierra, la Entidad Luminosa o Hudud del Aql o Mente Universal se ha aparecido en su forma física en numerosos ciclos o estaciones, siendo el  principal de los cinco Dignatarios (Hudud), y siempre acompañado de ellos, en las diferentes Eras pero bajo diversos nombres, entre los cuales se pueden mencionar algunos como:

 

.- En la Era de Adán su nombre fue Shanteel (Shatneil El Hakim).

.- En la Era de Noé se llamó Hood/Jibrail.

.- En la Era de Abrahán fue Duwijanis.

.- En la Era de Moisés era el profeta Jethro.

.- En la Era de Isaías fue Cristo.

.- En la Era de Mahoma su nombre fue Salman El-Farisi.

.- En la era de Al-Hakem Bi Amrillah fue Hamza Ibn Ali (en tiempos fatimitas).

 

   De los distintos ciclos religiosos que se han dado en el tiempo, desde la antigüedad hasta la fecha, dando nacimiento nuevas religiones, seguido de sus distintas divisiones, hay que recordar que muchos de esos ciclos y muchos sistemas religiosos siguieron uno después del otro antes del advenimiento de una de las mentes benditas o Maestros (Hudud) como Adán o Adam, hace más de 6000 años, llamado en las sagradas escrituras unitarias como Shatneil, quien era una encarnación del Aql (Mente Universal).

 

   Mientras Shantnil y sus cuatro asistentes (las encarnaciones del Alma Universal, de la Palabra o Verbo Universal, del Precedente y el Siguiente) guiaban a la humanidad hacia la sabiduría verdadera de Dios, el Adversario y las otras subsistencias opuestas y oscuras, en sus formas humanas, desviaron al hombre y lucharon para distraerlos de la verdad, historia que se repite en cada uno de los ciclos religiosos que ha tenido la humanidad.

 

   Para que el hombre regrese al camino de la verdad, y pueda ser salvado de su desviación para retomar al sendero real y sentirse en unión con el Uno, el Mensaje de Dios continuó siendo divulgado por pasos.

 

   Una vez más, el hombre tuvo que ser motivado a un sistema religioso basado en ritos, tal y como ocurrió con la religión de Hammurabi, o la del faraón unitario Akhenatón, o con Abraham y sus hijos, Ismael e Isaac, o Moisés, Cristo, Mahoma y así en las últimas religiones unitarias, sea el de los judíos, cristianos y musulmanes.

 

   Muchos de esos ciclos, con sus distintos ritos, el hombre sería entrenado de nuevo para comprender la verdad gradualmente. El Mensaje Divino fue entonces divulgado a la humanidad en períodos en los cuales el hombre le fue dado las enseñanzas de la sabiduría de Dios, y así ser capaz de comprender en esas etapas del tiempo y épocas de la humanidad.

 

   Cada etapa fue encabezada por un Proclamador (o promulgador) de una cierta cantidad de sabiduría (natiq). Este Proclamador le divulgó al hombre la cantidad de conocimiento necesario sobre la unidad de Dios que era capaz de comprender, promulgándole el mensaje exotérico del Mensaje Divino.

 

   Cada uno de estos promulgadores fue seguido por alguien que interpretó alegóricamente la Ley religiosa divulgada por el Proclamador y quien reveló un significado del Mensaje más profundo y más significativo que la simple connotación exotérica del aspecto literal de la Ley, fue llamado la Fundación o la base (al-asas), ya que este basó la enseñanza en el significado interior de esa ley religiosa, cuyo significado exterior había sido dado por el Proclamador de cada época.

 

   En cada una de estas etapas al hombre se le ha dado el conocimiento que puede asimilar, de allí que quienes alcanzaron el conocimiento verdadero de la unidad de Dios había pasado a través de la mayoría de las religiones.

 

   De esta forma, desde tiempos muy antiguos, uno de las mentes benditas, Naah, fue un Promulgador o Proclamador de la ley religiosa y su hijo Shem fue el Fundador (Fundación o Base). Después vino Abraham quien promulgo la Ley y su hijo primogénito, Ismael, fue la Fundación (para los judeo-cristianos fue Isaac, y por ello se produce un cisma entre esas religiones monoteísta.

 

Tras Ismael vino Moisés quien recibió las enseñanzas de la verdadera Ley de Dios, brindadas por el maestro (Nabi) Jethro (Nabi Shouéib), por lo tanto Moisés proclamó otra ley religiosa y Aarón fue su Fundador, y al morir éste, Joshua fue la Fundación. Después otra ley religiosa fue proclamada por Jesús de Nazareth y Simón Pedro (Pedro en las escrituras) fue la Fundación, allí en aquella época Jesús le dijo a Simón Pedro: (También yo te dio a ti, tu eres Pedro y sobre esta mesa de roca edificaré mi congregación”, Mateo 16:18), los cristianos tergiversaron este versículo al decir que Pedro tenía que edificar la iglesia en Roma.

 

   Luego vino el islám, el profeta Mahoma fue encargado de proclamar el testimonio verbal del Mensaje Divino que él recibió de las mentes benditas de entonces, del Arcángel Gabriel y o de Salmen El Farisi.

 

   Después de Mahoma el Mensaje Divino fue interpretado alegóricamente, ocasionando esto una división entre sus seguidores antes y después de su muerte.

 

   La deducción interna del testimonio verdadero tenía que ser divulgado de acuerdo a las condiciones del tiempo y la sociedad de esa época. Quien estaba encargado de divulgar estas deducciones internas fue llamado Imam o jefe de la comunidad, quien tenía que interpretar el Mensaje Divino de acuerdo a la necesidad del momento. Cabe señalar que Imam es más que un jefe, ya que esa palabra de origen árabe significa “Cuyo ejemplo es de seguir”, según la terminología druza.

 

   Durante el islám por tanto, el profeta Mahoma era el promulgador (natiq) del mensaje, mientras que Ali ibn Abi Talib, fue el primero de estos Imams, por lo tanto fue el Fundador (asas).

 

   Aquellos quienes alcanzaron la verdadera sabiduría de la Unidad de Dios deben haber pasado por cada una de esas religiones y leyes religiosas, quienes habían sido nutridos con una gran amplitud de la verdad, suficiente para adaptar sus capacidades mentales y espirituales. Por medio de las imposiciones rituales de cada Ley religiosa o cada religión, los hombres fueron entrenados en esa disciplina y fueron preparados para la próxima Ley Religiosa. Cada una de estas leyes, constituyeron un paso más, en la sabiduría de la Unidad de Dios que la anterior.

DIOS O ALLAH
 

Los drusos creen y reconocen a Dios todopoderoso, ÚNICO, Sempiterno, y por ende reconocen su voluntad por orden o por prohibición. Por orden para ser buenos y agradecidos, por prohibición para evitar lo malo y lo abominable.

 

Los Unitarios creen también que la bondad conduce a la verdad, la cual es el primer mandamiento del unitarismo y que la maldad es la falsedad. Este mandamiento a su vez es parte de la Ley de la Reencarnación y a su vez de la Ley del Libre albedrío.

 

Dios, Allah, Deus, God,el Uno, el Absoluto, el Gran Padre o como se le quiera nombrar y respetar, es el mismo nombre que se le da en todos los idiomas y culturas del mundo, para llamar o identificar a nuestro Señor, el Único, el Uno, o a Dios, indivisible, Sempiterno, Dios es el Absoluto.

 

Durante el curso del tiempo Dios ha sido ilustrado de muchas y diferentes maneras en las distintas filosofías y creencias teológicas. Lo han representado como a un gran anciano, o como a una gran luz, o como un destello o una brillante y gran nube.

 

En una de estas creencias hablan de Dios como el Creador del Universo. Se ha creído que Dios creó el Cielo y la Tierra cuando deseó hacerlo y que Él es el Gobernante de este universo, no obstante, Él está más allá y sobre todos los seres. Dios es el Absoluto

 

Pero hay que aclarar que Dios no está fuera del Universo, ni esta limitado por el espacio y el tiempo. Entonces, Dios no está sobre el Universo ni más allá de éste; Dios es la existencia en sí y en consecuencia Él es la Única Existencia, nada fuera de Él existe. Él es Todo. Ninguna limitación se le puede atribuir. Él es ilimitado.

 

Es por ello que en la Doctrina Filosófica Druza o del Tawhid se sostiene que Dios es todopoderoso cómo ser único, indivisible y sempiterno, “no hay más Dios que Él, exaltado en el poder, infinitamente sabio” quien no tuvo ni tiene hijos, igualmente no se admite que Dios tenga ni forma ni color, ya que es un ser o ente superior espiritual y pura, creador de todo el cosmos, de todo el Universo ilimitado, por ende, dador de la vida, ya que Él es el todo, el Absoluto.

 

Todo lo que se puede decir de Dios es que Él es la existencia en su pura realidad. Todos los seres existentes derivan de su existencia. Entonces “Su Ser”, es como señaló Ismail Ibn Muhammad (El Alma Universal en tiempos de Hamza) “más real que cualquier otro ser”, “Él es el uno”, pero sin ser numérico. Si el Uno quien es Dios, la Unidad Divina, es infinito, ilimitado y perfecto. Él contiene a todas las cosas sin ser divisibles como un uno numérico, el cual puede ser divisible en una infinidad de números de facciones. Él es la absoluta existencia, pero no como la suma total de las cosas existentes, sino que las cosas existentes son expresiones de la Unidad de Dios, ellas no son parte que constituyen un todo porque si una de esas cosas existentes dejara de existir, la Unidad Divina, el Uno disminuiría.

 

Es por esta razón que la Doctrina Unitaria Druza se llama Tawhid, una palabra árabe que significa creencia en la unidad del Ser.

SOBRE DIOS

 

1.-Debe saber que solo hay un Dios (Allah), el autor, el creador, el gobernante del universo, el Todopoderoso, eterno e incomprensible.

 

2.- Es el hombre el que invento las religiones y las divisiones de la misma, de allí las guerras y las calamidades de la humanidad.

 

3.- El Absoluto si es Dios, pero no el dios que tú conoces a través de las religiones, sino el dios que las religiones han perdido.

 

4.- Las religiones han sido un reflejo del estado de conciencia del ser humano y han sido un paso más en el proceso de maduración espiritual.

 

5.- Las religiones han llevado al ser humano a vivir en el miedo y el castigo, todo en el nombre de Dios.

 

6.- Las religiones siempre han presentado a Dios como un gran ente poderoso que rige y dicta sobre la humanidad, y ante quien los seres humanos son impotentes. Pero para el despertar final de la humanidad la religión será necesaria. La religión relegara al ser humano con el Todo, y así lo acercará por fin a Dios. Cuando eso suceda el ser humano recordará que Dios es el absoluto manifestándose a través del amor y que él mismo es una de las manifestaciones del Absoluto.

 

7.- En las religiones, en todas y cada una de ellas, desde la más moderna hasta la más antigua o primitiva, está el Espíritu de Dios. El problema está en la conciencia dormida del ser humano y no en las religiones.

 

8.- El hombre en este mundo es la máxima creación de Dios, nos dio mente, alma, el raciocinio y la palabra, entre otros dones de la creación. Igualmente, en nuestra Fe nos dio la causa y el efecto, así como el libre albedrio con el fin de dicernir entre el bien y el mal.

 

9.- El propósito de tu existencia es el de evolucionar espiritualmente tu mente y tu alma, esta última, el Alma, es parte de Dios, que con las sucesivas reencarnaciones  o vidas de tu existencia, es como ha de volver a Él.

 

Lo recuerdes o no, tu búsqueda es la de poder expresar todo el potencial divino de Dios, de ti mismo y a través de ti mismo.

 

Esa es en gran parte la esencia de la Doctrina Unitaria Druza o del Tawhid.

 

DIOS TODOPODEROSO.

 

La creencia principal de los Unitarios Drusos seguidores de la Doctrina Religiosa del Tawhid o del Unitarismo, es la singularidad de Dios.

 

Dios está en todas partes, no arriba, ni abajo, sino en todo, incluso la chispa que nos da vida a los seres humanos, como el alma, es parte esencial de Él, de allí el dicho, “De Dios somos y a Dios volveremos.

 

Pero hay que aclarar que Dios no está fuera del Universo ni está limitado por el espacio y el tiempo. Entonces Dios no está sobre el Universo ni más allá de éste; Dios es la existencia en sí y en consecuencia Él es la Única Existencia, nada fuera de Él existe. Él es Todo. Ninguna limitación se le puede atribuir. Él es ilimitado.

 

Es por ello que en la doctrina Unitaria Druza o del Tawhid se sostiene que Dios es todopoderoso cómo ser único, indivisible y sempiterno, “no hay más Dios que Él, exaltado en el poder, infinitamente sabio”, quien no tuvo ni tiene hijos, quien no admite compañía para ejercer su dominio igualmente no se admite que Dios tenga ni forma, ni color, ya que es un ser o ente superior espiritual y puro, creador de todo el cosmos, de todo lo ilimitado, y por ende, dador de la vida, ya que Él es el todo, el Absoluto.

 

Es falso decir que somos a imagen y semejanza de Dios, ya que Él es superior a ello, el hombre es su mejor creación, con mente, raciocinio y alma, que nos diferencia de los otros seres vivientes. Tampoco es correcto mirar hacia el cielo, pensando que Dios está arriba, ya que Él está arriba, abajo, a nuestra izquierda o derecha, afuera y dentro de nuestro cuerpo, Él es Universal, ya que está en todas partes.

 

Para los Unitarios Druzos, seguidores y creyentes de la Religión del Tawhid, no hay intermediarios entre Dios y el hombre, como lo hacen las otras religiones unitarias, y aunque existen en nuestros principios filosóficos  los cinco (5) pilares Hudud, o Límites o Dignatarios Espirituales, y aunque existan ellos como nuestros grandes maestros, ellos no son intermediarios, sino sólo nuestros guías espirituales para que creamos en Dios.

 

Debemos ser tajantes en este asunto, creemos en la singularidad de Dios, ya que Él está fuera del alcance de la comprensión de la mente Humana.

Él está por encima del lenguaje y del pensamiento.

Él no responde a ningún nombre, característica ni expresión.

Él no se puede definir con palabras, porque las palabras expresan lo que recogen los sentidos, la razón o la imaginación.

Su existencia no se puede captar, ni aún con la más profunda reflexión o meditación.

Él no tiene semejante ni oponente; es eterno porque no tuvo principio ni tendrá fin.

Él está en toda época y en todo lugar, sin limitación de tiempo ni de espacio.

Él es único, pero no de un número. Es único sin semejante.

Él es el Creador que con Su luz produjo todas las cosas y al cual todo volverá.

Dios es el único existente. Él es lo que es, el autosubsistente. Esta autosuficiencia es la esencia de Su unidad. El reconocimiento de Su unidad sin tratar de entender la naturaleza de Su ser es la base de la fe del creyente.

 

Todo lo que se puede decir de Dios es que Él es la existencia en su pura realidad. Todos los seres existentes derivan de su existencia. Entonces “Su Ser”, es “más real que cualquier otro ser”, “Él es el uno”, pero sin ser numérico. Si el Uno quien es Dios, la Unidad Divina, es infinito, ilimitado y perfecto.

 

Él contiene a todas las cosas sin ser divisibles como un uno numérico, el cual puede ser divisible en una infinidad de números de facciones. Él es la absoluta existencia, pero no como la suma total de las cosas existentes, sino que las cosas existentes son expresiones de la Unidad de Dios, ellas no son parte que constituyen un todo porque si una de esas cosas existentes dejara de existir, la Unidad Divina, el Uno disminuiría.

 

Él es pues, quien te ha creado; tu presente estancia en la tierra fue decretada por sus leyes; los poderes de tu mente, son dones de su bondad; las maravillas de tu forma son la obra de sus manos; TU ALMA ES SU ALMA, tu conciencia es su conciencia,

 

“QUIEN TIENE A DIOS LO TIENE TODO”, frase comúnmente bien usada, con una filosofía profundamente cierta.

 

Escucha, pues, su voz, porque está llena de gracia; y aquel que le obedece establecerá en su mente la paz profunda y llevará un crecimiento perdurable al Alma que reside dentro de su cuerpo estado tras estado, en esta tierra, nos referimos a la reencarnación.